12. Do I wanna know?

Do I wanna know?

Hampus Schratter

Acababa de terminar su turno en el Hospital General. Un descanso de una hora para almorzar y luego debía regresar. Hacía dos años que a Hampus le habían destinado la sección Deporte y de hecho estaba contento con ese sitio. Allí parecía que todos tenían gran conocimiento sobre cómo cuidar la salud, incluso los niños que venían a atenderse con él lo sorprendían con frases repletas de sabiduría. Por la mañana temprano, el pequeño Ian le había confesado que no había bebido el agua suficiente durante dos días, y que estaba seguro de que su dolor de panza provenía de allí. Hampus había tenido que sonreír de ternura. Los niños eran su mayor felicidad.

Sentado en un banco, mientras masticaba lo que le quedaba de un emparedado de jamón y queso, vigilaba a las personas que paseaban por el Parque Whiteley. La mayoría estaban trotando o haciendo flexiones. Casi por contagio, Hampus había comenzado a hacer actividad física, aunque estaba lejos de sentir pasión por ello. Su mirada se clavó en una morena que venía corriendo hacia donde él estaba. Dio un sorbo a su vaso gigante de gaseosa y se puso de pie para tirar todos los residuos en el cesto de basura.

Deporte, Parque Whiteley - 5 PM - con Jackie  

Do I wanna know?

Jackie Breslow

Los lunes eran el día más agotador y divertido de Jacqueline, ese día le tocaban las prácticas de fútbol masculino con los más pequeños. La morena tenía que pasarse las dos horas corriendo detrás de los niños, inventando siempre algún juego nuevo para mantener el orden y haciendo todo tipo de ridiculeces para que ellos no se distraigan. Además de que estaban en la etapa del por qué y aunque los adoraba, a veces le enloquecían con sus preguntas. Ese día su primer práctica había tenido que suspenderse cuando uno de los pequeños se quejó de un fuerte dolor de panza, Jackie lo acompañó al hospital pero tuvo que volver para sus prácticas con los juveniles luego de que la madre del pequeño Ian llegara.

Su jornada laboral había llegado a su fin y ahora ella tenía el resto de la tarde libre para poder hacer lo que deseara. Era un día soleado y hermoso y para Jackie eso solo significaba una cosa: ir al parque Whiteley a correr. Sabía que no tenía una vida muy interesante para una muchacha joven pero no le importaba, el deporte era su pasión desde que había aprendido a caminar prácticamente. Toda su familia pertenecía a deportes y sus padres se habían encargado de criarla a ella y a su hermano menor para que estuvieran siempre en movimiento.

Iba por su tercera vuelta cuando distinguió en un banco al pediatra del hospital, estaba haciendo un pequeño picnic y parecía haber notado su presencia también. Jackie se detuvo frente a él y lo miró con una sonrisa en sus labios, tendiéndole la mano para estrechársela. - Hola Dr. Schratter, soy la entrenadora Breslow- se presentó, sacando del bolso que colgaba de su hombro su botella de agua, estaba agitada - Lamento molestarlo pero quería saber si usted podía decirme como está Ian Simons - se había quedado pensando en el pequeño todo el día y no había tenido suerte al contactar con su madre, ir al hospital le parecía exagerado sabiendo que debía verlo al día siguiente así que encontrárselo era una suerte y un alivio para su preocupación con sus alumnos. Jackie le dio un largo trago a su botella, volviendo a fijar su mirada en él después.

Deporte, Parque Whiteley - 5 PM - con Hampus ©

Do I wanna know?

Hampus Schratter

Además del cuidado por su salud, los miembros de Deporte solían ser gente amable. Hampus atribuía ésto a la felicidad brindada por la actividad física misma. Durante el día las calles estaban repletas y también los parques. Aunque por la noche, era extraño ver los pubs y los restó repletos y bulliciosos. Una vez había tenido la oportunidad de conocer Entretenimiento, y para Hampus, que apoyaba la libertad más allá del límite impuesto por Axies, había sido una excelente experiencia.

Pensaba todo ésto de pie junto al cesto. Parecía que examinaba el material de la bolsa de consorcio, pero de hecho estaba absorto en sus pensamientos. Una voz lo sacó de sus cavilaciones y vio que la morena que anteriormente había visto a lo lejos estaba junto a él haciéndole una pregunta. Entonces la reconoció. Por la mañana había llevado al pequeño Simmons a atenderse al Hospital. Sus labios se movían muy rápido para el castaño, pero eso lo hizo sonreír. Estrechó su mano casi de forma automática, antes de disponerse a responder.

- Él ya está bien, lo envié a casa con una dieta sana. Por cómo estaba, estoy seguro de que comió algo en mal estado. De todas maneras les indiqué que regresaran si los dolores continuaban. Podría ser algún tipo de virus a lo sumo, pero aquí en Deporte parece imposible para los microorganismos dañinos desarrollarse con facilidad - Su boca estirada en una sonrisa y sus ojos brillantes la invitaron a sentarse en el banco con una seña de su mano. - Por favor, señorita... tendrá que disculparme pero no recuerdo su apellido - se disculpó antes de sentarse él mismo nuevamente

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Do I wanna know?

Jackie Breslow

Jackie no recordaba jamás haber salido de deportes y realmente desconocía como era la vida en los otros sectores. Solo podía imaginarsela por comentarios que había escuchado y por las características mismas de cada zona, pero eso solo hacía que su curiosidad disminuyera porque no se podía ver a sí misma en entretenimiento usando su conjunto deportivo ante las miradas de todas esas chicas de vestidos cortos y ajustados de la tele o en tecnología donde creía que todos eran tan serios y vivían casi en automático. Sí, prejuzgaba en ese sentido, pero es que realmente no se podía imaginar la vida diferente de como se vivía allí.

Sonrió aliviada al escuchar que su pequeño alumno se encontraba bien, aceptando su invitación luego y sentándose a su lado. - Mi nombre es Jackie, Jackie Breslow - se presentó ella como James Bond, le parecía muy divertido que él no la tuteara. No estaba acostumbrada a esa clase de trato tan distante, menos viniendo de alguien que parecía rondar su edad . - No sé tu nombre tampoco pero me atrevo a decirte que tienes cara de Emmett, ¿eres un Emmett? - Jackie lo miraba con una sonrisa en los labios mientras hablaba a gran velocidad. Es que así era ella, siempre tenía demasiada energía para el gusto de muchos.

Deporte, Parque Whiteley - 5 PM - con Hampus ©

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Hampus Schratter

Momentos después ambos estaban sentados en el banco, Hampus tenía los codos apoyados en los muslos y el rostro ladeado hacia ella. Breslow, exacto. Acababa de decírselo y el rubión ya se había olvidado. Poseía la extraña característica de recordar cientos de diagnósticos y muchas caras, pero en cuanto a lo demás se le hacían lagunas. Los nombres eran su primer padecimiento. Sonrió ante las ocurrencias de la deportista, bajando la cabeza negando mientras tanto.

- ¿Emmet? ¿De verdad? - quiso saber sin poder borrar la donrisa de su rostro, volviendo a alzar la cabeza en dirección a ella. - De hecho mi nombre es Hampus, iba a ser un poco difícil jugar a ser las adivinanzas. - Con unosotros excelente humor en esa tarde en particular, decidió que su frase no terminaría allí. Se encogió de hombros y frunció los labios - Padres ingeniosos - le confesó, notando que en la línea del horizonte comenzaba a atardecer.

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Do I wanna know?

Jackie Breslow

Jackie jugaba de manera distraída con el cierre de su bolso sin dejar de mirarlo, examinando de manera tranquila sus ojos. La joven deportista tenía lo que se llamaba heterocromía parcial, por lo tantos sus ojos eran de diferente color. No era algo que nadie notara a simple vista, pues el derecho era verde mientras el izquierdo era más bien hazel, y tampoco algo que conscientemente la acomplejara ya que no era la única en su familia con esa afección. Pero aún así ella lo buscaba en los demás en un hábito tonto que tenía desde pequeña.

Se rió suavemente ante su broma, ni en un millón de años hubiera adivinado su nombre. Sus padres no tenían nada que ver con los de él, ni siquiera le habían puesto un segundo nombre a ella o a sus hermanos y de ser Jackie un varón se hubiera llamado Thomas. - Es muy original, me encanta - le dijo sinceramente, nunca lo había escuchado - ¿Y tú nombre tiene alguna historia? ¿O tus padres lo inventaron? - no podía evitarlo, Jackie siempre pecaba de curiosa. Esperó su respuesta mientras terminaba por abrir el cierre de bolso y buscar en el interior la bolsa con manzanas que había comprado esa mañana. Sacó una para ella y estiró su brazo hacía él para ofrecerle una a él.

Deporte, Parque Whiteley - 5 PM - con Hampus ©

Do I wanna know?

Hampus Schratter

Hampus se quedó momentáneamente anonadado con las consecutivas preguntas de Jackie, se la quedó mirando unos segundos con las cejas en alto, dando por sentado que se sorprendìa de su curiosidad, pero luego se rió de manera fresca, porque claramente sus inquietudes no le molestaban. - De hecho es una historia horrorosa. Mis padres también son médicos, mi padre es cirujano y mi madre oftalmóloga, al parecer se conocieron en clases de un tal Dr. Hampus. Hampus era su apellido. Y me lo pusieron como nombre - le contó paso a paso la historia, haciendo pequeñas pausas para agregar dramatismo. - Esa es la historia, tengo como nombre el apellido de un médico, que si me lo preguntas siempre me lo imagino como un anciano decrépito - Para ser de salud, el castaño era muy animado. Sus colegas no comprendían mucho su humor.

- Me alegra que te hayas acercado Jackie, soy relativamente nuevo en Deportes, estoy aquí hace unos meses, y no conozco mucha gente aquí. Obviando a mis colegas en el Hospital, pero... - Hampus rodó los ojos en un gesto histriónico pero desestructurado, que terminó en una carcajada. El castaño apoyó sus codos sobre sus rodillas y estiró las manos hacia adelante, entrelazando sus dedos con la cabeza ladeada en dirección a ella. No había notado la diferencia de color en su mirada, en Sol no estaba alumbrándola a la cara sino que golpeaba directamente en la espalda de la morena. - ¿Naciste aquí? - le preguntó, no quería terminar esa conversación.

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Do I wanna know?

Jackie Breslow

Jackie sonrió cuando él se rió tan alegremente antes de empezar a contarle su historia, le gustaba como Hampus relataba y como se expresaba, transmitía mucho con sus gestos. Además tenía que admitir que él era muy simpático y amable para ser doctor, la mayoría del personal que trabajaba en el hospital de deportes se la pasaba quejándose porque odiaban el cambio de facción, les costaba mucho adaptarse a la energía de deportes. Todas eran muy diferentes y muchos de los habitantes adquirían las características tan marcadas de su sección. Era difícil despegarse.

Ella tampoco quería terminar la conversación. Era una tarde hermosa y los rayos de sol caían sobre su espalda, la calidez del ambiente en sí sumada a la del doctor era muy agradable. Jackie le dio un mordisco a su manzana mientras lo observaba, apresurándose para tragar cuando él le hizo una pregunta. - Si, mis padres son grandes deportistas - Jackie estaba muy orgullosa de los logros de su familia - Mi madre era tenista, mi padre jugaba el fútbol. Su primera cita fue en este mismo parque de hecho - su mirada fue a parar a la extensión del parque de mañera soñadora, se los podía imaginar riendo y jugando carreras. Sus ojos iluminados volvieron a buscar los de él. - ¿Tú eres de Salud, no? ¿Cómo es? Nunca fui - le confesó, todos sus familiares directos eran de deportes así que ella nunca había tenido una razón suficientemente buena como para visitar otras secciones.

Deporte, Parque Whiteley - 5 PM - con Hampus ©

Do I wanna know?

Hampus Schratter

Se notaba a simple vista el carisma que la entrenadora tenía, y Hampus estaba como hipnotizado mientras ella relataba la historia de sus padres y su primer cita. Actualmente los padres de Hampus estaban separados, destino predecible de acuerdo a las personalidades que tenían. Eran dos médicos ortodoxos, reconocidos en la sección de Salud, tan eficientes que competían el uno con el otro. Habían buscado por años contagiar su ambición en su hijo, pero el castaño, aunque apasionado por su profesión, carecía de competitividad. El futuro de toda la familia había sido de imaginar. Al tener su prueba de aptitud Hampus había quedado en Salud, pero la primer oportunidad de irse de allí la había tomado casi desesperadamente.

- No quieres saberlo tampoco - bromeó con ella, apoyando la espalda en el respaldo del banco. - Son todos unos estirados, nadie sale de noche y se la pasan estudiando. Mis compañeros se ofendía cuando yo decidía no estudiar e ir a beber una cerveza - Hampus ladeó el rostro para mirar a la morena, el cabello le caía lacio después de su alta cola de caballo. - ¿Está buena? - le preguntó, enviándole una mirada breve a la manzana, dibujando una sonrisa cómplice en sus labios finos.

Deporte, Parque Whiteley - 5 PM - con Jackie  ©